Hoy con Sil decidimos hacernos amigas de Giselle. Ella trabaja en la redacción también. Sólo que ella no atiende teléfonos como nosotras, sino que escribe. Tiene un trabajo digamos.
Giselle es madre primeriza de Nestor Juan, y si, esposa de un peronista a ultranza. Es divertida, pero tiene el problema que tienen todas las madres primerizas... tener un hijo y tener un discurso basado únicamente en él.
Así es como nos enteramos hoy que Nestu -así le dice ella- ya esta haciendo caca espesa y con olor, habla mas de lo habitual, ya dijo por primera vez una vocal a la par de una consonante, y que cuando ella dice "mama" él la mira. Como si fuera poco, también lo llevó a la oficina, y tuvimos con Sil que mantener una conversación con él en donde abundaban las palabras en disminutivos y expresiones como ggggggh (lo cual Giselle tradujo en "mirá como le gusta que lo llames cuchirilo papotero"). Y nunca, en toda la mañana, escuche que el pendejo dijera una vocal con una consonante, ni que la mirara a Gi cuando ella decía mamá (miraba a Sil, supongo que relacionaba mama con mujer embarazada y bueno... Sil es gorda). Lo que si comprobamos es que adora chupar mis lapiceras finas, jugar con mi perfume importado de cartera, bajarle el escote a Sil hasta que quede en lolas frente al jefe de redacción, y que si, ya caga espeso y con olor.
Giselle es madre primeriza de Nestor Juan, y si, esposa de un peronista a ultranza. Es divertida, pero tiene el problema que tienen todas las madres primerizas... tener un hijo y tener un discurso basado únicamente en él.
Así es como nos enteramos hoy que Nestu -así le dice ella- ya esta haciendo caca espesa y con olor, habla mas de lo habitual, ya dijo por primera vez una vocal a la par de una consonante, y que cuando ella dice "mama" él la mira. Como si fuera poco, también lo llevó a la oficina, y tuvimos con Sil que mantener una conversación con él en donde abundaban las palabras en disminutivos y expresiones como ggggggh (lo cual Giselle tradujo en "mirá como le gusta que lo llames cuchirilo papotero"). Y nunca, en toda la mañana, escuche que el pendejo dijera una vocal con una consonante, ni que la mirara a Gi cuando ella decía mamá (miraba a Sil, supongo que relacionaba mama con mujer embarazada y bueno... Sil es gorda). Lo que si comprobamos es que adora chupar mis lapiceras finas, jugar con mi perfume importado de cartera, bajarle el escote a Sil hasta que quede en lolas frente al jefe de redacción, y que si, ya caga espeso y con olor.
ROMA
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